Expertos de diferentes ámbitos de la química pondrán en valor el papel de esta área esencial de la ciencia para plantar cara a la pandemia de COVID-19 desde sus diferentes perspectivas.
La actual crisis sanitaria supone un reto sin precedentes al que la Industria Química española, como actividad declarada esencial. La ciencia y la química han respondido desde el inicio garantizando la continuidad de las cadenas de suministro que, sobre todo, en la primera ola de la pandemia, se vieron muy tensionadas.
Para ello, ha sido capaz de transformarse, redoblando su capacidad productiva y reorientando, en muchos casos, sus líneas de producción a la fabricación de los productos más demandados durante la emergencia sanitaria y cuya producción creció de manera exponencial: desde los gases medicinales como el oxígeno; los productos farmacéuticos, antisépticos o productos biocidas para la potabilización del agua, como el cloro, o para la desinfección y limpieza; incluídas las materias primas plásticas para fabricar jeringuillas, bolsas de suero, respiradores, productos quirúrgicos o para envasar alimentos; hasta polímeros y fibras sintéticas para la fabricación de EPIs, entre otros muchos productos y materiales.
En su vertiente farmacológica, el sector químico español ha sido capaz de mantener el suministro de medicamentos de choque, a la vez que ha desplegado todo su potencial investigador de manera urgente en el hallazgo de vacunas y tratamientos farmacológicos efectivos para paliar la incidencia de la pandemia y hacer frente a futuros rebrotes.
Desde el punto de vista económico, y a pesar de verse afectado por el desplome de dos de sus principales sectores demandantes como son la automoción y la construcción, la Industria Química se ha desenvuelto con solvencia logrando mantener el 95% de su capacidad productiva activa, incluso en los momentos más críticos. Y más importante aún, ha logrado conservar e incrementar en un 2% los puestos de trabajo directos, lo que refrenda su compromiso permanente con el empleo.
La química, como Ciencia y como Industria, ha trabajado, trabaja y seguirá trabajando, para velar por la salud y la seguridad de todos ante este desafío humanitario mundial.