Actualmente, proporcionar un entorno de trabajo saludable, que se mantenga en las mejores condiciones higiénicas de forma constante, es clave para la satisfacción, el bienestar y la productividad de los empleados. Los estudios muestran que el 72% de los empleados son reacios a recomendar a los solicitantes de empleo una empresa con una higiene y desinfección de oficina deficiente, mientras que el 70% considera que este hecho afecta realmente a su satisfacción laboral general. En otras palabras, el ambiente de trabajo influye en la satisfacción general de los empleados y la higiene juega un papel decisivo en esta cuestión. Las investigaciones también muestran que las quejas sobre los aseos son las más comunes. Por eso es esencial asegurar la calidad y la constancia en la limpieza. Especialmente ahora, cuando la higiene es una prioridad máxima.
De hecho, los directivos que han decidido reabrir sus oficinas o están pensando en hacerlo se muestran preocupados por mantener a sus equipos a salvo pero también deben satisfacer las necesidades de sus clientes, garantizando la calidad del servicio. Hay que buscar el equilibrio. En este escenario, la labor del Facility Manager es decisiva, ya que su objetivo es ofrecer, al equipo de trabajo, una experiencia gratificante, minimizando el impacto de los problemas y las quejas. Pero mantener el control de esa gestión es un desafío. A la presión de los costes hay que añadir el hándicap que representa el nuevo concepto de oficina –los espacios laborales son cada vez más abiertos y flexibles y, por tanto, más difíciles de organizar, máxime cuando los trabajadores se mueven libremente por todo el área.
Es un hecho que los trabajadores pueden contagiarse al tocar superficies contaminadas por COVID-19, por lo que los puntos de alto contacto deben limpiarse y desinfectarse con frecuencia para ayudar a reducir la propagación de la infección. Ante estas circunstancias excepcionales, desde Tork recomendamos trabajar en un protocolo de limpieza ad hoc, que cubra las diferentes áreas de la oficina:
- En general. Las áreas de alto tráfico con superficies que se tocan con frecuencia deben ser priorizadas y limpiadas con regularidad. Sugerimos utilizar paños de limpieza desechables, que sean cambiados a menudo. Hay que asegurarse siempre de que los profesionales de limpieza tengan su propio equipo de protección para que estén a salvo. Por otro lado, sería recomendable que los empleados tengan a su disposición toallitas desechables para que puedan limpiar áreas específicas cuando sea necesario. Para eso es necesario una óptima colocación del dispensador de higiene de manos. Hay que asegurarse de colocar el equipo de higiene en áreas visibles y accesibles fácilmente, donde hay un flujo natural de tráfico. Los empleados no deberían tener que desviarse para acceder a esos dispensadores, hay que facilitarles el camino hacia la desinfección en la oficina.
- Recepción. Limpiar frecuentemente los picaportes, las pantallas táctiles y los botones de ascensores. Mantener soluciones de limpieza cerca para que sea una tarea rápida.
- Oficina. Limpiar, a menudo, los equipos de alta tecnología compartidos como teclados, ratones de ordenador, impresoras y teléfonos y asegurarse que la limpieza de la superficie se lleve a cabo regularmente. Proporcionar toallitas desechables para la limpieza a los empleados para que puedan limpiar su espacio personal cuando lo necesiten.
- Aseos. Según datos de un reciente estudio, el 81% de los encuestados a nivel mundial esperan que los aseos públicos proporcionen un entorno de higiene más seguro ahora que antes de la crisis de COVID-19. Los protocolos de higiene nunca han sido tan importantes. Por eso recomendamos comenzar a limpiar las superficies menos sucias para terminar con el inodoro y el suelo.
- Salas de descanso. Recomendamos también comenzar a limpiar las superficies menos sucias para terminar con el suelo. Las superficies manchadas con grasa o aceite se deben limpiar con agua caliente y detergentes de limpieza profesional antes de ser desinfectados.
Al final, la higiene y desinfección en una oficina es responsabilidad de todos: de los profesionales y empleados que la mantienen limpia, de los directivos que priorizan la limpieza, de los Facility Managers que organizan el protocolo. Un gran número de empresas en España estamos trabajando para que recuperar cierta rutina en la oficina sea posible.
En Tork llevamos 50 años comprometidos con la higiene porque sabemos que impacta directamente en el bienestar de las personas. Por eso acabamos de presentar una nueva página web de apoyo a las empresas en el momento de reabrir sus negocios de forma segura y responsable. Se trata de un punto de encuentro en el que las empresas tendrán a su disposición recursos y soluciones que les ayudarán a prepararse para dar servicio a sus clientes en un nuevo entorno, mientras que desarrollan su plan de reapertura y actualizan los protocolos de higiene.
Entre los recursos disponibles en la nueva web se incluyen un conjunto de herramientas gratuitas y descargables ‘Vuelta al negocio’, que han sido desarrolladas por un equipo de expertos en higiene global de Tork. Con una amplia experiencia en higiene profesional, Tork apoya a las empresas con el conocimiento necesario para cumplir -y superar- las crecientes expectativas en materia de higiene.