Que la limpieza es un factor imprescindible en cualquier tipo de negocio, especialmente en los comercios, no es ninguna novedad: es esencial para mantener un ambiente seguro y confortable para el equipo de profesionales y la clientela. En consecuencia, y según un estudio sobre tendencias de consumo del Gobierno de España, ésta también resulta un factor determinante en la experiencia de compra y en la percepción general de la marca.
En dicho informe, el 27% de los consumidores y consumidoras valoran el aspecto del establecimiento donde compran como uno de los criterios de elección del comercio, ya que les proporciona sensación de bienestar. No es de extrañar que esto sea así en un contexto de digitalización en expansión en el que, con tan solo un clic, podemos tener todos los productos a nuestro alcance.
Dada la practicidad de las compras on-line, cuando el cliente entra en un establecimiento de manera presencial, aspira a que éste aporte un ambiente de limpieza y orden. Así lo explica el gerente de Deyse, empresa especializada en servicios de limpieza y desinfección, David García: “Cuando el consumidor prioriza desplazarse físicamente a una tienda, espera alcanzar el mayor grado de comodidad posible. En este sentido, es crucial que, desde una limpieza profesional y eficiente, contribuyamos a crear una buena imagen de marca a todos nuestros clientes”, comparte.
García destaca que la limpieza “no solo se centra en mantener las superficies libres de polvo y suciedad, sino que también hace referencia a la higiene en general y a la desinfección”. Hay zonas concretas, como los baños o las áreas de alimentación y bebida, donde las personas que van a comprar esperan que se mantengan los máximos niveles de pulcritud y salubridad. Por eso, añade, “si estas áreas no se mantienen limpias, la experiencia de compra puede verse negativamente afectada”.
Conscientes de esta realidad, Deyse ha desarrollado una nueva aplicación que, de manera interna, permite registrar y validar todo el proceso de limpieza del establecimiento con el máximo detalle. A través de ella, quedan anotados todos los productos que se han utilizado a lo largo del servicio, la certificación y las fichas técnicas de los mismos, el momento en el que se ha realizado la limpieza e incluso, en los casos de la industria alimentaria, la formación que ha recibido el equipo de profesionales al respecto. “Se trata de una aplicación con la que buscamos alcanzar nuestra máxima eficiencia para, con ello, cumplir con los más altos estándares de limpieza y desinfección”, especifica el gerente de la empresa.
En este contexto, la limpieza constituye un valor añadido, intangible, que ayuda a una empresa a diferenciarse de su competencia porque puede asociarse como parte de la buena calidad de los servicios que ofrece el establecimiento y contribuir a que sea percibida como más rigurosa. Por ello, no solo puede aumentar la fidelización de los consumidores y consumidoras; también puede contribuir a incrementar el éxito del negocio.