Después de 10 meses de pandemia. En primer lugar, quiero dirigir unas palabras de agradecimiento a las empresas y empleados del sector de la limpieza profesional que, durante estos últimos meses de incertidumbre, ha demostrado una notable valentía, perseverancia y tenacidad, para que nuestros servicios, en la lucha activa contra la propagación del Covid-19, hayan seguido funcionando y siendo efectivos a pesar de los problemas que se han producido por los arranques y paradas producto de la segunda ola.
Ya contamos a esta revista, cómo fuimos actuando en la primera declaración de Alarma y confinamiento con una comunicación ágil para todo el sector e hicimos de paraguas y punto de encuentro para todo el sector asociado o no. Con reuniones constantes por videoconferencia y muy comprometidos con las organizaciones a las que pertenecemos CEOE, EFCI con reuniones frecuentes durante este período para responder a las preguntas hora a hora. Todas las áreas se vieron afectadas: social, comercial, contratación pública, negociación colectiva, tecnología, productos, seguridad y salud, por supuesto. La experiencia adquirida por ASPEL en esos momentos es un orgullo para todos nosotros, y su capacidad de respuesta.
Ahora desde que se pasó a la coogobernanza de la Comunidad Autónoma ha sido mucho más difícil gestionar todas estas áreas con la diferente respuesta dada en cada momento (17 diferentes y en tiempos distintos). Aunque hemos seguido siendo útiles, eficaces y comprometidos por el bien de nuestro sector en esta lucha diaria contra el Covid-19. Con el lanzamiento de la Campaña “la limpieza el valor de lo esencial”, los Premios Princesa de Asturias, el día del trabajador y los seminarios que hemos impartido, se ha cambiado y transformado la visión de la sociedad. Ahora somos más visibles y la ‘esencialidad’ de nuestro trabajo de limpieza, que puso en valor la pandemia, es alentadora, ya que la mayoría reconoce que los trabajadores y las empresas de limpieza han hecho posible luchar eficazmente contra la propagación del virus.
Esta segunda ola del Covid-19 puede producir el riesgo de hundir a las empresas, especialmente a las pymes, en sectores que esperaban que se recuperaran a finales de año. Y luego, creo que el desarrollo del teletrabajo tendrá un impacto en nuestro negocio a corto y medio plazo. Todo los índices que estudiamos apuntan a que el año 2021 será un año difícil, lamentablemente.
Preocupados estamos, sí. Aunque nuestro sector hoy es más visible y se ha demostrado que es transversal, si nuestros clientes de otros sectores se relanzan, la limpieza se relanzará también con ellos. Pero también, por otro lado, estamos contentos por cómo hemos trabajado de manera ardua y del resultado de nuestro ‘lobby’, y de la campaña que estamos realizando con una estrategia de relaciones públicas.
Pero esta crisis también ha puesto de relieve la necesidad de entornos saludables y que nuestro know-how es un activo estratégico. Depende de nosotros mejorar aún más nuestra experiencia y responder a esta necesidad de higiene que, creo, será un movimiento fundamental que continuará después de esta crisis de salud.
Más allá de eso, el debate en el comienzo del año 2021 estará en las ayudas a partir del mes de enero en aquellos sectores que aún no se pondrán en marcha, como los derivados del turismo y del transporte, particularmente, el aéreo.
En ASPEL trabajamos además mucho la contratación pública y estamos en contacto directo y permanente con nuestras empresas titulares de los contratos públicos; y ahora con la futura venida de Fondos Europeos, se acentúa aún más y debemos canalizar los proyectos en los que nuestros asociados se involucren.
También debemos seguir con los trámites para conseguir el cambio o derogación de la ley de desindexación (ley 2/2015) en vigor, que pone unos límites inasumibles a nuestro 40% del sector, que depende de la contratación pública.
Permítanme enfatizar también que necesitaremos moderación salarial para 2021, eliminar el daño que nos hace cualquier subida de costes laborales (salarios y seguridad social), que no podemos repercutir a nadie. Que esta pandemia ha puesto de relieve también que la negociación colectiva en nuestro sector de limpieza debe simplificarse y mucho, debe llegar a tener un solo convenio pronto y debemos perseverar con los agentes sociales en ello, y conseguirlo más pronto que tarde. Para todos es conveniente y este periodo post Covid-19 tiene la mejor coyuntura para conseguirlo.
No es tanto una cuestión de precio como de visión. Mañana, como ayer, el desconfine invitará a toda España a regresar a sus lugares de trabajo. Para trabajar en entornos saludables, la provisión de limpieza ya no es necesaria sino imprescindible y nuestro saber hacer un activo estratégico. Sin embargo, al mismo tiempo, algunos de nuestros clientes están atravesando importantes dificultades económicas (transporte, hoteles y eventos, ocio, cultura, por citar ejemplos) y tendrán dificultades para volver a un nivel anterior al Covid-19 de actividad durante varios años y, por tanto, están en proceso de reducir la compra de servicios, incluso si sus usuarios les requieren esfuerzos en esta área de higiene.
La provisión de limpieza ya no es necesaria sino imprescindible y nuestro saber hacer un activo estratégico
También podemos hablar sobre el impacto del teletrabajo en nuestros servicios. Para el sector de la limpieza, se estima que hay alrededor de un 35% menos de presencia en las oficinas, que son el 45% de nuestro mercado, lo que para nuestras empresas supondrá una caída de la actividad y, en definitiva, la destrucción de puestos de trabajo.
Vemos que nos encontramos ante un mandamiento paradójico: por un lado, la limpieza nunca ha sido percibida como un servicio imprescindible y esencial para los usos (empleados y clientes de nuestros clientes) y, por otro lado, existe una gran tentación para muchos de nuestros clientes, que están experimentando dificultades económicas, de degradar sus especificaciones y acuerdos de servicio. La figura que publicamos la usamos en un seminario por videoconferencia y repasamos el efecto Covid-19 para cada segmento hasta la llegada de la vacuna.
En este panorama complejo, queremos convencer a nuestros clientes a pensar de manera diferente sobre la compra de limpieza usando la «Guía del Valor Optimo”, y a ofrecerles consultoría de acuerdo a sus necesidades reales, para una compra eficiente y responsable de la limpieza. No solo de demostrar –sobre costes- , sino de cómo actualizar los servicios de limpieza para nuestros clientes. Poniendo las evoluciones en protocolos, frecuencias, sistemas y productos de la limpieza para estar siempre a la altura de los desafíos.