Revista Mantenimiento y Limpiezas 158
a fondo distribución Limpie Z as / Marzo-Abril 2022 20 españolas que hasta ese momento se dedicaban a otras cosas. En este sentido, para el sector químico supuso un auténtico reto, al tener que suministrar todo tipo de productos de limpieza e higiene; a pesar de la escasez de envases y tapones o sustancias como el alcohol, el triclosan o la glicerina, im- prescindibles en los geles hidroalcohóli- cos. Y todo ello, sin olvidar al sector del plástico, que tuvo que centrarse en la producción de guantes, batas y equipos de protección, que los profesionales de la distribución tuvieron que hacer llegar a hospitales, centros de salud y otros destinatarios como residencias, ponien- do en riesgo su propia salud. Afortuna- damente, las empresas de distribución demostraron su profesionalidad mante- niendo las máximas medidas de segu- ridad para proteger a sus trabajadores, considerados esenciales. En cualquier caso, esta situación tra- jo como consecuencia una subida de precios que pagó tanto la distribución como los clientes finales, hasta que la situación se controló meses después y se ‘normalizó’; pero por el camino tuvie- ron que hacer frente a numerosos ERTEs ante el cese de servicios por el cierre de empresas, comercios y negocios. Esto, además, motivó la caída de la factura- ción en este tipo de empresas. Por suerte, la situación empezó a encauzarse a finales de 2020, cuando todo el mundo aprendió a convivir con la pandemia y los cauces habituales de distribución de productos se estabiliza- ron, en la medida de lo posible. El sector empezaba a respirar tranquilo dentro de la intranquilidad que daba vivir en mitad de una pandemia. Además, la imagen se vio reforzada, “la crisis sanitaria ha demostrado la capital importancia que tiene la distribución y la logística. Son sectores de primera necesidad que no han parado su actividad y han estado a la altura en los momentos más difíciles de la pandemia”, asegura José María Triviño, director general de adis Higiene. El bloqueo del Canal de Suez Sin embargo, poco duró el respiro. Y es que, en marzo de 2021, sucedía otro he- cho tan inesperado como determinante. Uno de los buques portacontenedores más grandes jamás construidos, el Ever Given, se quedó atascado en el Canal de Suez paralizando el transporte marí- timo mundial y congelando casi 10.000 millones de dólares de comercio al día. Para el sector de la logística fue de las peores pesadillas que podían vivir. Y, por supuesto, eso afectó de lleno a la distri- bución de productos de limpieza e higie- ne en nuestro país. De nuevo, hubo que lidiar con retrasos, escasez de materias primas, aumentos de precios... Y, lo que es peor, este suce- so constituyó la antesala de lo que faltaba por venir en los siguientes meses del año. Nos referimos a la crisis logística interna- cional que ya se estaba gestando. Para entenderlo, basta con recordar los datos que proporcionó hace poco la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD, por sus siglas en inglés). Este organismo indicó que, tras la caída del intercambio de bienes y servicios en 2020 debido a la pandemia, en 2021 se evidenció una recuperación de un 25% con respecto a 2020 y de un 13% frente a 2019. Es decir, el mundo volvió a ponerse en marcha pi- sando el acelerador de golpe, poniendo al comercio internacional en uno de los mayores atascos de la historia. Los cuellos de botella se fueron mul- tiplicando a lo largo de toda la cadena de producción, desde el proveedor de materias primas, hasta la fabricación del productor y su posterior distribución hacia el cliente final. Y el sector de la lim- pieza e higiene profesional no fue ajeno. Paralelamente, a esto se añadió una crisis de producción y transporte de ma- terias primas que dio como consecuencia la escasez de materiales y la subida de precios. Como ejemplo, basta recordar el problema que hubo con los polímeros para la fabricación de útiles para la desin- fección, o de celulosa para la producción de papel para la limpieza de superficies. La guerra en Ucrania y la huelga en España Y con esta situación tan volátil en los dos últimos años es como llegamos a principios de 2022. De nuevo, un hecho ‘inesperado’ volvió a cambiar las reglas del juego de la situación internacional y nacional. El pasado 24 de febrero, tras muchas amenazas previas, Rusia inva- dió Ucrania, con enormes consecuen- cias directas –más allá de los problemas que se derivan de cualquier guerra como la pérdida de vidas humanas– para la economía mundial. Lo más importante ha sido una consi- derable subida del precio de la energía, el gas y el petróleo, que ha impulsado el El Ever Given se quedó atascado en el Canal de Suez paralizando el transporte marítimo mundial y congelando casi 10.000 millones de dólares de comercio al día REPORTAJE
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